La tía de Paris Hilton fue prácticamente desheredada por su padre y no mantenía relación con su madre
Francesca Hilton, hija del magnate hotelero Conrad Hilton y de la mítica estrella del cine Zsa Zsa Gabor, falleció víctima de un infarto a los 67 años el pasado lunes en Los Ángeles. Poco conocida entre el gran público, para las jóvenes generaciones su nombre resultará más familiar al relacionarlo con el de Paris Hilton, su archipopular sobrina nieta.
Los avatares de Francesca no han llenado páginas y páginas como las andanzas de la polémica Paris aunque su biografía sea digna de una superproducción de Hollywood, que de haberse rodado en los años cincuenta bien podría haber protagonizado su madre: la historia de una mujer que pudo tenerlo todo y que sin embargo murió alejada del lujo y la pompa que le hubiera correspondido por nacimiento.
Única hija del segundo matrimonio del multimillonario fundador de la cadena de hoteles Hilton con la actriz de origen húngaro, la joven creció a la par que se disparaba el imperio económico del visionario empresario. Una ingente fortuna de la que apenas recibiría unos simbólicos 100.000 dólares a la muerte de su padre en 1979.
Ninguneada en el testamento de su progenitor, en los últimos tiempos las relaciones con su madre, que en la actualidad tiene 97 años, tampoco fueron idílicas. Hilton, a la que en la década de los 80 y 90 era habitual ver junto a Gabor en eventos públicos, mantuvo una larga batalla judicial con el noveno marido de la artista por el control de su patrimonio.
En su comparecencia ante el juez en julio de 2012, Francesca, que obtuvo entonces un permiso para visitar semanalmente a su madre a solas, sostuvo Frederic von Anhalt mantenía a la artista - gravemente enferma- "cada vez más aislada" y "sedada" y cuestionó la forma en que gestionaba sus finanzas.
El agente de Hilton, que trabajó como fotógrafa profesional, actriz y publicista en la década de 1980, se mostró consternado por su muerte. "Estábamos al teléfono pocos minutos antes de que ella muriera, conversábamos sobre un libro que ella estaba escribiendo. En un momento, tuvo que ir al baño y ya nunca regresó".
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
No comments:
Post a Comment