Solo hay un amigo (Reflexión)

New York, Por, Lissette García,

Lamentablemente a veces la vida no es lo que esperamos y mucho menos aquellos que nos rodean aprecian, quien eres o lo que vales, si bien es cierto que nunca deberíamos de esperar cuando damos nuestro amor, esfuerzo o dedicación, duele mucho y nos hace mucho daño. Coraje y impotencia de ver como cada día los seres humanos nos vamos desgastando y devaluando, la hipocresía se va haciendo cada vez más elocuente, ya no disimulan, hay una lucha constante de intereses y a la misma vez, muy por debajo te hacen sentir que no eres nadie, que no vales nada.

Hoy te digo que no importa cuán grande sea tu pena, cuan inmenso tu dolor, tienes que luchar, es un deber, no estás solo o sola, alguien mayor que todos, aquel que es el dueño del oro y de la plata, el si está pendiente de ti y le importas, porque para él eres una joya única e irrepetible, puesto que eres obra de sus manos, el te creo a su imagen y semejanza, por lo que no debe importarte lo que hagan o dejen de hacer aquellos a quienes tanto has querido y hoy son solo un simulacro y una burda imagen de lo que creíste ver en ellos.

Recuerda que todo en la vida tiene su tiempo, solo permite que Dios haga la obra que ha destinado en tu vida, pues solo el pondrá todo como debe de estar, en el momento justo, Dios obra de manera que todavía por más inteligentes y estudiados, jamás entenderemos la capacidad y el orden divino, pero siempre recuerda, ”Dios escribe derecho sobre renglones torcidos”, quien no lo entienda siempre vivirá perdido en el valle de sombras de muerte, el siempre estará contigo, siempre dispuesto a perdonarte y a darte una oportunidad y otra y otra, pues nunca se cansara de ti, vino a buscar a los enfermos, pues los sanos no necesitan de un medico y él es quien cura nuestras heridas, como al hijo prodigo así está dispuesto a perdonarte y a darte todo su amor.

Cierra definitivamente el círculo que te ha estado haciendo daño y busca refugio en los brazos de aquel que dio a su unigénito, para que todo aquel que en el crea no muera más tenga vida eterna.


Lissette García
RosasSinEspinas