ROMA.- Francia cerró temporalmente el domingo su frontera a los trenes que venían desde Italia con inmigrantes africanos y manifestantes, una medida contra la que Roma protestó formalmente, acusando a París de violar los principios europeos.
El ferrocarril italiano y la policía fronteriza dijeron que Francia estaba evitando el paso de todos los trenes que pasaban la frontera por el paso Ventimiglia-Menton.
El ministro de Relaciones Exteriores italiano, Franco Frattini, instruyó al embajador de Italia en París a expresar "la firme protesta del Gobierno italiano a las autoridades francesas", dijo una declaración de la Cancillería.
Las acciones de Francia fueron consideradas "ilegítimas y en clara violación de los principios generales europeos", dijo.
Italia se ha quejado de que sus socios europeos lo han "dejado solo" con miles de inmigrantes principalmente tunecinos, que han llegado a la isla sureña de Lampedusa en las últimas semanas escapando de la tensión política en el norte de Africa.
Italia ha empezado a recibir a inmigrantes con permisos temporales dejándolos irse del país para viajar a otros destinos de Europa, una política que ha sido criticada por varios de sus socios, incluidos Francia y Alemania.
A algunos de los países del bloque de 27 países de la Unión Europea les preocupa de que ofrecer asilo a demasiados inmigrantes aliente la entrada de ilegales a Europa.
El tránsito ferroviario a través de la frontera se reinició en la tarde, dijo el Ministerio del Interior francés.Cientos de italianos protestaron en la estación de trenes de Ventimiglia contra las medidas de Francia, entonando consignas anti-francesas y tratando de convencer a la polícia de que les permitiera manifestarse en las afueras del consulado de Francia en Menton.
El ministro del Interior, Roberto Maroni, dijo en una entrevista televisiva el domingo que la postura de Francia era "incomprensible" e "injustificada contra Italia".
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