GAZA.- Israel y el movimiento islamista Hamas, en el poder en Gaza, dijeron el domingo que están de acuerdo con poner fin a la confrontación, la más mortífera desde 2009 con saldo de 18 muertos y 70 heridos palestinos, si cada lado respeta una tregua.
Este domingo no se registraron muertos por primera vez en tres días, no hubo ataques aéreos israelíes y bajaron a solo una decena los disparos de cohetes contra Israel desde la franja de Gaza.
Israel está dispuesto a "detener los disparos" contra los grupos armados palestinos de Gaza, si ellos también cesan sus ataques, declaró este domingo a la radio pública el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak.
Barak es el primer dirigente israelí en plantear un alto el fuego desde el inicio de la escalada de violencia, que comenzó el jueves con un disparo de misil antitanque palestino contra un autobús escolar en Israel. En el ataque resultó herido de gravedad un adolescente.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, amenazó con ataques "mucho más duros" si continúan los disparos desde Gaza contra el sur de Israel. "Si continúan los ataques criminales contra militares o civiles israelíes, la reacción de Israel será mucho más dura", advirtió Netanyahu, al abrir este domingo el consejo de ministros.
El brazo armado del Yihad islámico, las Brigadas Al-Qods, se declaró "comprometido al consenso (entre movimientos palestinos) en torno a la calma en la franja de Gaza si el enemigo se compromete a cesar cualquier forma de agresión contra nuestro pueblo".
De hecho, los disparos del domingo fueron reivindicados por pequeños grupos armados, pero ninguno por Hamas o Yihad islámico, que habían asumido la responsabilidad de la gran mayoría de los disparos de los días anteriores.
La Liga Arabe pedirá al Consejo de Seguridad de la ONU que imponga una zona de exclusión aérea en la franja de Gaza para impedir las intervenciones de la Fuerza Aérea israelí, declaró el domingo el jefe de la organización, Amr Musa.
"Hemos encargado al grupo árabe de la ONU que convoque a una reunión del Consejo de Seguridad para pedir que se imponga una zona de exclusión aérea a la aviación israelí sobre Gaza", afirmó Musa al terminar una reunión de la Liga Arabe en El Cairo.
Israel había respondido a los disparos de Gaza con ataques que mataron a 18 palestinos e hirieron a cerca de 70, según fuentes médicas. Entre las víctimas hay civiles y miembros de organizaciones armadas palestinas. Hasta ahora se habían disparado unos 140 proyectiles desde la franja de Gaza, en la confrontación más violenta desde la operación israelí "Plomo endurecido", en enero de 2009.
El ministro de Asuntos Estratégicos, Moshe Yaalon, considerado un halcón, dijo a la radio militar que espera "que Hamas haya aprendido la lección y comprendido el precio tan alto que ha tenido que pagar". Hamas, que decretó el estado de emergencia en el territorio, dijo el domingo, por tercera vez desde fines de marzo, que está "dispuesto a una tregua" con la condición de que Israel detenga "su agresión", según un portavoz del movimiento islamista. "Nuestro mensaje al ocupante es que responderemos con una tregua a toda tregua" decidida por Israel, declaró el portavoz, Sami Abu Zuhri.
Por otro lado, Hamas anunció que detuvo en los últimos días a varios colaboradores de Israel, sin precisar su número ni los actos imputados, y advirtió que perseguirá a todo "traidor" que trabaje con el Estado hebreo.
El ejército se felicitó de que el nuevo sistema de defensa antimisiles israelí interceptara en las últimas 48 horas ocho cohetes de tipo Grad, de un alcance de 50 kilómetros.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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