Chris O’Neill, el adinerado banquero que conquistó a Magdalena de Suecia

Christopher O’Neill es el hijo del banquero inglés Paul O’Neill y de la «socialité» de origen austríaco Eva Maria Walter. Nació en Londres en junio de 1974 y se crió a caballo entre la capital inglesa y la ciudad suiza de San Galo, donde estudió en el elitista Institut auf dem Rosenberg. O’Neill tiene cinco hermanastras de los matrimonios previos de sus padres. Sus nombres son Tatyana, Natascha, Stephanie, Analiza y Karen. Para realizar sus estudios universitarios, O’Neill escogió dos instituciones en Estados Unidos. Concretamente en la Universidad de Boston, donde se graduó en Relaciones Internacionales; y la Universidad de Columbia, donde cursó un máster en Administración de Negocios (MBA). Tras obtener su maestría, O’Neill trabajó para diversas compañías financieras internacionales como NM Rothchild & Sons y Steinberg Asset Management. Actualmente el adinerado empresario trabaja para Noster Capital, un fondo de inversiones del que es socio y en el que ocupa el puesto de Director de Investigación. Romance en la Gran Manzana Entre las aficiones de O’Neill se encuentran el tenis, el golf y el esquí. Además, O’Neill es un apasionado de la música y la literatura, y un acérrimo fan del Chelsea, el popular equipo de fútbol inglés. Chris O’Neill conoció a la menor de los tres hijos del Rey Carlos Gustavo de Suecia y su esposa, la Reina Silvia, en Nueva York a finales de 2010. A esta ciudad había llegado la princesa Magdalena unos meses antes para trabajar en la World Childhood Foundation, una agencia de Naciones Unidas que su madre cofundó; y para huir de la alargada sombra de su reciente ruptura con Jonas Bergstrom, el abogado sueco con el que la princesa había estado prometida desde agosto de 2009. La primera vez que el mundo supo de O’Neill fue cuando unas fotografías del banquero con la Princesa Magdalena fueron filtradas a la prensa. En las imágenes, tomadas en enero de 2011, se podía ver a la pareja almorzando en un restaurante de Central Park. Su relación fue oficialmente confirmada en octubre de 2012, cuando la Casa Real de Suecia informó públicamente del compromiso matrimonial de la Princesa Magdalena. El sueño de cualquier suegra Se sabe poco de la forma en que O’Neill pidió la mano de la Princesa. Sin embargo, ambos detallaron en un comunicado oficial que había sido muy «íntima y romántica» y que O’Neill había sido muy tradicional, ya que primero tuvo la deferencia de pedir su mano al Rey Carlos Gustavo. Desde su compromiso, O’Neill ha comenzado a aprender sueco, aunque confiesa que es «bastante difícil». Por ahora no le será de gran utilidad, ya que la pareja ha anunciado que planea continuar residiendo en Nueva York, aunque no descartan trasladarse a Suecia en el futuro. El futuro esposo de Magdalena ha sido recibido cordialmente por la familia real sueca. De él la Reina Silvia ha dicho que es «el sueño de cualquier suegra». Por su parte, el Príncipe Carlos Felipe, hermano de la Princesa Magdalena, y el Príncipe Daniel, marido de la princesa Victoria, organizaron recientemente una escapada para que O’Neill pudiera conocer mejor tanto a los príncipes, como a sus amigos suecos. Sin tratamiento real O’Neill ha anunciado que no se nacionalizará en Suecia, dado que desea mantener sus actuales nacionalidades inglesa y estadounidense. Además, el futuro esposo de la Princesa Magdalena ha renunciado a recibir el título de Príncipe de Suecia y Duque de Gastrikland y Halsingland, y a ocupar ninguna posición de responsabilidad dentro de la corona sueca. «Christopher O’Neill ha solicitado respetuosamente seguir siendo un ciudadano privado y no recibir el estatus de realeza», explicó la Casa Real en un reciente comunicado. La decisión de O’Neill se debe a que la corona sueca no permite a sus miembros ocupar cargos de responsabilidad en entidades privadas. Como su deseo es seguir trabajando para Noster Capital, O’Neill no ha tenido más alternativa. Algunos señalan que la decisión de O’Neill es más que respetable, sobre todo si tenemos en cuenta que la mayoría de actos a los que debería acudir como príncipe estarían pensados para prepararlo para una futura posición como Monarca, algo que es solo remotamente probable, dado que la Princesa Magdalena es cuarta en la línea de sucesión al trono sueco. Lissette Garcia RosasSinEspinas