El Movimiento por la Paz que lidera el poeta Javier Sicilia en defensa de las víctimas de la guerra contra el narcotráfico lanzada por el presidente Felipe Calderón hace cinco años y que se ha cobrado ya 50.000 vidas ha rechazado de plano la propuesta de diálogo ofrecida por el Gobierno. El motivo es que el Movimiento entiende que el Ejecutivo pretende “diluirlo” al proponer una reunión en la que participarían otras asociaciones de víctimas de modo que el grupo de Sicilia solo contaría con dos representantes y una intervención de 15 minutos.
“El formato del encuentro no es el acordado el pasado 23 de junio en el castillo de Chapultepec. Entonces el presidente Calderón nos prometió volvernos a ver en tres meses. Es muy importante que el Gobierno no traicione su palabra. La clase política no entiende aún que se trata de una situación de emergencia nacional”, afirmó Sicilia en conferencia de prensa el pasado jueves.
El grupo de Sicilia contra la impunidad y a favor de las víctimas de la violencia, iniciado tras el asesinato de su hijo Juan Francisco en Cuernavaca el pasado marzo, no es ni mucho menos el más veterano de esta causa, pero sí el que mayor repercusión internacional ha tenido en su lucha por hacer visibles a la víctimas.Emilio Álvarez Icaza, exombudsman de la capital y quien negocia los términos del hipotético encuentro con los funcionarios del Gobierno, explicó que su movimiento “no tiene ninguna intención de polemizar con otras asociaciones o crear división entre las víctimas”, sino de desarrollar la agenda pactada en junio que incluía, entre otros temas, la protección de las víctimas, la política de seguridad y la participación democrática. Álvarez Icaza aseguró que la marcha atrás del Gobierno obedece a la petición del Movimiento por la Paz de que la reunión fuese pública con presencia de los medios de comunicaciónEl Gobierno, por su parte, negó en un comunicado cualquier clase de compromiso firme por parte del presidente Calderón el pasado 23 de junio e insistió en que el diálogo debe ser “amplio, plural e incluyente” con todas “las organizaciones sociales interesadas en fortalecer la estrategia de seguridad”.
El Movimiento por la Paz retó al Gobierno a comparecer el próximo 7 de octubre en el Castillo de Chapultepec para que “honrase su palabra”. Sonó a ultimátum pero de momento el diálogo no se ha roto. 2012 es año electoral en México con la elección de un nuevo presidente y es también la hora de las víctimas de la violencia. Una tragedia que impondrá que la agenda de la paz entre en campaña. “Estamos viviendo en el lodo. Hay que detener este horror”, sentenció Sicilia.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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