KILDARE.- En compañía de su esposo Felipe, duque de Edimburgo, la reina Isabel II visitó este jueves los haras nacionales de Irlanda, uno de los establecimientos de cría de purasangres más reputados del mundo.
La soberana británica visitó el haras de caballos de Kildare, antaño propiedad del Gobierno británico, en el tercer día de su histórica visita al país, tras dos días de ceremonias solemnes y cargadas de simbolismo que marcaron la reconciliación entre los dos países.
La Reina es una reconocida criadora de caballos y propietaria de varios ejemplares de carreras, y continúa montando a pesar de sus 85 años.
El reponsable del haras, John Osbourne, escoltó a la reina por las instalaciones, donde la "nueva estrella", un semental llamado Jeremy, levantó sus patas delanteras al ser presentado a la ilustre visitante.
Tras la visita, la soberana y su esposo Felipe presenciaron una demostración de un simulador de caballo de carreras.
La joven jinete Sophie Ralston, de 18 años, iba a medio galope hasta que el príncipe Felipe pidió que pusieran la máquina a la máxima velocidad.
"Insistió en poner la máquina a todo galope", dijo el ministro irlandés de Agricultura, Simon Coveney. Sin embargo, Ralston, que lleva ocho meses de entrenamiento se lo tomó con calma. "Parecía realmente interesado. Quería ver cómo funcionaba", explicó.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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