Durante la mañana del viernes un hombre armado con un rifle abrió fuego en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, matando a un agente de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) e hiriendo a varias personas. Según señaló Jim Featherstone, jefe del Cuerpo de Bomberos de Los Ángeles, las autoridades atendieron a 7 heridos, de los cuales 6 fueron transportados a hospitales cercanos.
Patrick Gannon, jefe de la organización de aeropuertos Los Angeles World Airports (LAWA), detalló que alrededor de las 09:20 de la mañana un hombre accedió a la Terminal 3 del mencionado aeródromo, conocida como la terminal Tom Bradley. Este hombre sacó de una bolsa un rifle de asalto y abrió fuego frente a un control de seguridad del aeropuerto. Aunque Gannon no pudo confirmarlo, algunos testigos informaron de que fue en este punto cuando el asaltante acabó con la vida de un agente de la TSA.
La Agencia de Seguridad del Transporte (TSA) ha confirmado que uno de sus agentes ha fallecido en el tiroteo que se produjo hoy en el aeropuerto internacional de Los Ángeles. «Múltiples oficiales del cuerpo fueron tiroteados, uno de ellos de forma fatal», indicó la entidad en un comunicado.
El agresor ha sido identificado como Paul Ciancia, de 23 años y residente en la ciudad californiana. El supuesto tirador se encuentra bajo custodia de las autoridades y habría sido trasladado a un hospital en estado muy grave. La identidad del presunto autor de los disparos ha sido confirmada por fuentes oficiales a la cadena NBC y por la congresista Loretta Sanchez a la CNN. Según esta última cadena, el sospechoso ha recibido varios disparos en el pecho.
A continuación el hombre armado cruzó la zona de control y siguió disparando hasta acceder a la zona de embarque de la Terminal 3. Allí fue donde los agentes de policía lo encontraron, abrieron fuego contra él y consiguieron apresarlo.
Durante la primera rueda de prensa tras el incidente, el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, confirmó que el asaltante había actuado en solitario. Ni la identidad ni el estado del asaltante haban sido confirmados por las autoridades, por lo que aún se desconoce si sigue o no con vida. Aunque algunos medios informaron de que el sospechoso ha fallecido a causa de los impactos de bala recibidos, este hecho no había sido refrendado con la policía. Las autoridades tampoco compartieron detalle alguno sobre el estado de salud de los heridos.
«Estábamos aquí tranquilamente cuando alguien empezó a disparar. Escuché un tota de quizá 8 o 10 disparos», explicó a la cadena NBC Nick Pugh, uno de los testigos del suceso. Otros testigos aseguraron haber escuchado hasta 15 disparos.
Tras los disparos cundió el pánico entre los viajeros que se preparaban para pasar los controles de seguridad y poco después la terminal afectada fue evacuada a través de varios autobuses y ambulancias.
Mientras duró la investigación, la administración del aeropuerto se encargó de informar a través de su cuenta de Twitter de las novedades en el caso. Entre las actualizaciones que el aeropuerto pudo confirmar estuvo que la Administración Federal de Aviación (FAA) había decidido retener todos los vuelos que tenían previsto despegar desde el aeródromo, el sexto más grande del mundo por volumen de tráfico. Aunque el permiso para aterrizar sí se mantuvo, los pasajeros no pudieron abandonar las aeronaves hasta que se anuló la orden de evacuación de las terminales afectadas.
Este percance tuvo lugar menos de un mes después de Dicarlo Bennet, un empleado del aeropuerto, hiciera explotar una bomba de hielo seco en uno de los baños del recinto. Otros dos artefactos explosivos fueron encontrados en las inmediaciones de la explosión, lo que obligó a las autoridades a detener el tráfico aéreo y aumentar los controles de seguridad.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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