Luego de anunciar su divorcio con Tom Cruise, la actriz cree que sus movimientos son vigilados por esta doctrina
Katie Holmes solicitó el divorcio de su marido Tom Cruise -ferviente seguidor de la cienciología- la semana pasada. Sin embargo, la artista cree que sus movimientos han podido estar siendo controlados tras haber visto un coche aparcado fuera de su apartamento de Nueva York con varios "hombre sospechosos" en su interior.
"Tres días antes de que se hiciera público su divorcio había un Mercedes aparcado fuera del apartamento de Tom en Greenwich Village. Estaban aparcados a unos metros de la casa. Eran dos hombres con gafas y semblante sospechoso. Cuando Katie salió la empezaron a seguir discretamente. Estaba claro que no eran paparazzi. Parecían antiguos militares y llevaban una pequeña cámara digital de bolsillo", declaró una fuente al periódico The Sun.
Katie, que solicita la custodia legal exclusiva de su hija de seis años Suri, estaba tan nerviosa que le pidió a su propio equipo de seguridad que les tomara una foto para enviarla a la policía.
"Los guardaespaldas de Katie salieron y empezaron a filmar a los hombres. Entonces llamaron a la policía, que se acercó al coche a preguntarles lo que hacían", añadió la fuente.
La obsesión de su ex marido con la cienciología parece haberse convertido en el principal punto de discordia entre la pareja, y lo que habría llevado a Holmes a poner punto y final a su relación con el protagonista de cree qye.
"Katie simplemente quiere lo mejor para Suri. Esto es horrible para ella, pero está siendo valiente. Es una situación terrible para Kate", concluyó.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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