LIEJA.- La querella presentada el pasado junio por Aisha Gaddafi, hija del líder libio, ante un tribunal belga contra la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) por presuntos crímenes de guerra cometidos por la alianza fue desestimada, según fuentes judiciales.
Según la legislación belga y bajo su "competencia universal", es posible teóricamente acusar a un líder extranjero por crímenes de guerra o genocidio, siempre que exista un nexo demostrable entre Bélgica y la parte acusada.
No obstante, la justicia belga se ha declarado incompetente.
Contrariamente a lo que alegaban los abogados de la querellante, no puede establecerse vínculo alguno demostrable entre el reino de Bélgica con las víctimas o autores de esos supuestos crímenes de guerra que alegaba la hija de Jaddafi.
Debido a que la acusación iba dirigida de facto contra la OTAN, los miembros de la alianza, que integran el operativo "Protector Unificado" en Libia, gozan de inmunidad diplomática y no pueden ser sujetos de persecución judicial.
Por otro lado, el abogado Ghislain Dubois, que representa a un ciudadano libio que perdió a varios miembros de su familia además de su casa en un ataque de la OTAN, explicó que en breve se producirá una acusación civil contra la alianza atlántica por daños y perjuicios.
Reclamarán a la OTAN 100.000 euros como suma compensatoria por ello.
La hija de Gaddafi presentó la acusación el pasado 8 de junio por los ataques del pasado 30 de abril a cargo de la OTAN, en los cuales su hermano Saif al Arab, su hija de cuatro meses, Mastoura, y sus sobrinos Seif y Cartago, ambos de dos años, perecieron.
"Creemos que atacar una casa civil en la cual viven un hombre y tres niños no forma parte del mandato que la ONU ha dado (a los militares de la alianza) en Libia", dijo Luc Brossolet, abogado francés que actuaba en nombre de Aisha Gaddafi.
La OTAN asegura que los bombardeos contra "los centros de control y comando", entre ellos el lugar en el cual murió Saif al Arab, forma parte de las acciones aliadas para prevenir ataques del régimen libio contra los civiles, según la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU.
"El hecho de que la OTAN tenga sede en Bruselas" es suficiente argumento para poner a la alianza bajo jurisdicción belga, afirmó en su momento Brossolet, a pesar de que otros expertos no estaban de acuerdo y vaticinaban, como así ha sido, el fracaso de la demanda.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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