El que fuera el último doctor personal de Michael Jackson (Conrad Murray) y que resultó ser responsable de su muerte por homicidio involuntario, según el Tribunal Superior de Los Ángeles, pretende volver a a ejercer su profesión después de haber perdido su licencia de medicina.
El juez Michael Pastor dijo entonces: «Murray carece de sentido de culpa y remordimiento, lo cual es un auténtico peligro». Sin embargo, después de que se conociera que recobraría su libertad el próximo 28 con tan solo cumplidos dos años de prisión en vez de los cuatro a los que había sido condenado, ahora aseguran fuentes de su entorno a TMZ que luchará para lograr la revocación de su licencia en Texas y en California.
Él, según las mismas fuentes, considera que fue «objeto de un trato injusto porque el paciente era muy famoso» -refiriéndose al rey del pop- y que, «además de la catástrofe del propofol, su historial de 20 años en la medicina es impecable». Al parecer, Murray tiene quien respalde esa alegación. Hay una «legión de pancientes» que están dispuestos a declarar a favor de él en la corte de Texas y Califonia y así conseguir que vuelva a ejercer. Si las intenciones de Murray no llegarán a buen puerto, el no cejaría en su empeño y estaría dispuesto a abrir la posibilidad de practicar la medicina en otro país.
Por su parte, la familia del cantante no ha dicho todavía nada sobre estas intenciones. Sin embargo, si que se han pronunciado sobre su puesta en libertad: «Queremos que la gente sepa cómo nos sentimos por este veredicto. Este hombre estará caminando por la calle este mismo mes. Matas a Michael Jackson y en dos años estás fuera, apesta. Y nos duele, todavía nos duele. Somos fuertes pero humanos».
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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