José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy hablaron el lunes para compartir su preocupación sobre la cumbre europea del 23 de octubre y el plan de revaloración de la deuda española, pero también aprovecharon la llamada para hablar de ETA. Según fuentes del PP, ambos comentaron la posibilidad de que ETA haga un comunicado relevante en breve, aunque el presidente no le trasladó a Rajoy ninguna certeza sobre la fecha y el contenido del comunicado, lo único que le importa al PP. En realidad, el PP cree que sobre este asunto hay muchas más intuiciones que certezas. Los populares, con la información que tienen a través del Gobierno y otras fuentes, creen que es posible que haya un comunicado en breve, aunque quieren esperar a ver el contenido para opinar. Eso es lo que aseguró Rajoy el martes en público. El líder del PP mantiene su estrategia de bajo perfil en el asunto de ETA, y hoy mismo en la presentación de la lista por Madrid, Rajoy no ha dicho ni una palabra sobre el asunto mientras Esperanza Aguirre insistía en que "por culpa de los socialistas los terroristas han vuelto a las instituciones".
En su discurso, Rajoy ha pedido a los españoles "un Gobierno fuerte", esto es, una mayoría absoluta, aunque enseguida ha añadido que después de tenerla él "hablará con todos los que quieran ayudar a ese proyecto común" que es salir de la crisis. "Haré un Gobierno firme, que decida, porque lo peor es no hacer nada, pero estaremos atentos a lo que nos diga la sociedad y el resto de fuerzas políticas", ha sentenciado Rajoy.
El PP mantiene su campaña a medio gas, y de hecho todavía no tiene ni siquiera programa, después de cuatro conferencias programáticas. El programa está listo hace tiempo, pero la estrategia del PP es presentarlo lo más tarde posible para evitar que se abra el debate sobre su contenido. Los populares prefieren que se siga hablando del Gobierno y de la crisis antes que de sus propuestas. Finalmente, será el 31 de octubre cuando se apruebe el programa en un Comité Ejecutivo en Galicia, a solo 20 días de las elecciones. Además, las propuestas más novedosas se dejarán para la campaña, esto es más adelante, un formato similar al de la campaña de 2000, que Rajoy dirigió y que tiene como modelo, entre otras cosas por el resultado: 183 diputados que el PP confía ahora incluso en superar.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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