Un palestino ha matado a una persona y herido al menos a 14 al arrollarlas con su furgoneta en el límite entre Jerusalén este y oeste. La policía israelí, que considera lo sucedido un atentado, ha abatido a tiros al conductor, identificado como Ibrahim Al-Akari. Dos de las víctimas que han sobrevivido están heridas de gravedad.
El atropello se ha producido en dos fases. En un primer momento, el agresor ha dirigido su furgoneta blanca contra un grupo de cuatro personas en la calle número 1 —el linde entre este y oeste— y después ha arrollado a otras 10 en un cruce cercano. El hombre ha abandonado entonces su furgoneta y ha atacado a los viandantes con una barra de hierro antes de que le disparara la policía.
"El atropello es el resultado directo de la instigación de Abu Mazen (Mahmud Abás)", sentenció el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, durante la ceremonia de conmemoración del 19º aniversario del asesinato del primer ministro israelí Isaac Rabin. Netanyahu consideró culpables también a "los socios de Hamás" del presidente palestino y aseguró que "no ha habido ningún cambio en la sociedad palestina hacia la aceptación del derecho del pueblo judío a su propio Estado".
Hace dos semanas, un niño de tres meses murió y otras siete personas resultaron heridas cuando un vehículo conducido por otro palestino atropelló a los viajeros que subían y bajaban de un tranvía. Este suceso también se produjo en plena línea verde, la que separa el este y el oeste de la ciudad. Una de las víctimas de ese atropello múltiple, una mujer ecuatoriana de 22 años, falleció posteriormente a consecuencia de las heridas.
Jerusalén vive unos días especialmente tensos. El intento de asesinato de un activista ultranacionalista judío, y la muerte a manos de la policía del palestino sospechoso de perpetrar ese ataque, derivaron el pasado 30 de octubre en enfrentamientos y en el cierre temporal, decretado por las autoridades israelíes, de la Explanada de las Mezquitas.
La policía ha bloqueado hoy el acceso de judíos a la Explanada tras los enfrentamientos registrados a primera hora en el lugar entre agentes y manifestantes palestinos. Un portavoz policial confirmó a la agencia Efe que el acceso a ese recinto sagrado para judíos y musulmanes quedaba por el momento cerrado, después de que decenas de jóvenes musulmanes arrojasen piedras, petardos y cohetes a los uniformados.
Mientras tanto, el Gobierno jordano llamó hoy a consultas a su embajador en Israel en protesta por la "escalada sin precedentes de las violaciones" contra la mezquita de Al Aqsa, sita en la Explanada y tercer lugar sagrado del islam.
En virtud de los acuerdos de paz de 1994, Israel reconoce el derecho de Ammán de proteger los lugares santos islámicos y cristianos de Jerusalén Este, ocupado por Israel desde la guerra de 1967.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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