La estudiante saudí Nahid Almanea, de 31 años, regresaba a su domicilio de Colchester (Essex, este de Londres) el pasado martes cuando un desconocido irrumpió en su camino y le asestó 16 puñaladas mortales. En el momento del brutal asesinato, Almanea vestía una «abaya» (túnica musulmana) de color azul oscuro y cubría su cabezo con un pañuelo negro.
Aunque de momento se desconoce la autoría del crimen, la Policía ha confirmado que la joven podría haber sido atacada por su condición religiosa y maneja la distintiva vestimenta asociada al Islam como la primera línea de investigación del apuñalamiento. La muerte de Almanea ha extendido el pánico y el horror entre los ciudadanos de Colchester, ya que éste es el segundo asesinato que sacude la ciudad en menos de tres meses. James Attfield fue apuñalado hasta 100 veces en un parque el pasado mes de marzo.
La Policía ha aconsejado a los residentes extremar las precauciones, ser «conscientes de su entorno y no transitar solos por lugares aislados», mientras que tratan de dar con el asesino. De momento, se ha detenido a un hombre de 52 años de edad que está siendo interrogado bajo sospecha de asesinato y los responsables del caso tratan de averiguar si existe algún vínculo con la muerte Attfield.
«Ambas víctimas fueran apuñaladas con saña y caminaban por parques muy transitados. Hay diferencias, como el género, pero no podemos descartar la posibilidad de un crimen de odio», declaró el responsable de crímenes de la Policía de Essex, Supt Hawkings.
El detective hace hincapié en que el crimen se perpetró en una vía muy transitada donde se espera que haya más personas presentes. «Fue un ataque imprudente, descarado y hay una alta probabilidad de que varias personas estuvieran o pasaran por allí en ese momento».
Inevitablemente, el asesinato a hachazos del soldado Lee Rigby a plena luz del día en el barrio londinense de Woolwich el pasado año ha vuelto a planear sobre la memoria de los británicos, después de que la policía haya confirmado que investiga el caso como un asesinato por la condición religiosa de la víctima. De confirmarse las sospechas de las autoridades, este nuevo crimen perpetrado a las diez de la mañana en un lugar concurrido y al parecer con alevosía, representaría el caso inverso al de Rigby.
Llegó por un curso de inglés
Almanea se había mudado al Reino Unido hace sólo seis meses para matricularse en un curso de inglés. Vivía con su hermano y todos sus profesores destacaban su gran interés y esfuerzo en la materia. «Nahid era una estudiante muy trabajadora, disciplinada y concienzuda, que estaba haciendo un excelente progreso. Era tranquila y muy respetada y tenía ambiciones para aprobar los estudios. La echaremos de menos», comentó el director de la academia, Richard Barnard
El inspector jefe de Colchester, Richard Phillibrown, declaró que su prioridad actual es «proteger a la gente y avanzar en la investigación», prometiendo mayor presencia policial. Además agregó que resulta fundamental que los ciudadanos «extremen las precauciones, estén atentos a lo que sucede en su entorno y eviten caminar solos».
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
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