CIUDAD DEL VATICANO.- El féretro con los restos de Juan Pablo II será sacado de su tumba, en las Grutas Vaticanas, el 29 de abril y colocado el 1 de mayo delante del Altar de la Confesión de la basílica de San Pedro, para que los fieles puedan venerarlo tras ser beatificado por Benedicto XVI.
Una vez fuera de la tumba, el ataúd será colocado sobre un catafalco cubierto con una tela blanca delante de la monumental tumba de San Pedro, en las Grutas Vaticanas, donde permanecerá hasta pocas horas antes de que comience la ceremonia de beatificación, según precisó el portavoz vaticano, Federico Lombardi.
Las Grutas Vaticanas permanecerán cerradas al público los días 29 y 30 de abril, y el 1 de mayo. El féretro con los restos del Papa Wojtyla -fallecido el 2 de abril de 2005 a los casi 85 años- no será abierto ni exhumando, señaló Lombardi.
"No se verá el cadáver de Juan Pablo II", subrayó Lombardi, que dijo que no será descubierto, debido al corto espacio de tiempo que hace de su fallecimiento.
Una vez que Benedicto XVI lo haya proclamado beato, el propio Papa y los cardenales irán en procesión desde la Plaza de San Pedro hasta el interior de la basílica. De ahí, los fieles podrán acercarse hasta el féretro para rendirle homenaje.
La basílica de San Pedro estará abierta mientras que dure el flujo de fieles, para permitir que los cientos de miles que se esperan, puedan rezar ante el primer Pontífice polaco.
Una vez concluida las celebraciones, el féretro será trasladado a la capilla de San Sebastián, para permitir una mayor afluencia de fieles en el futuro.
Lissette Garcia
RosasSinEspinas
No comments:
Post a Comment